Rosarino, ¿qué más puedo decir? Ya eso lo dice todo.
Se nos fue un amigo, y justo el día antes del día del amigo. Que cosas.
Negro, como decían, seguro estás haciendo cagar de risa a Dios en el Cielo. Y acá nunca te vamos a olvidar, si nos hacés reir todos los días. Sos inmortal, pero humilde, justo como querías, porque la risa es barata, es gratis, es de todos los días... pero vale un vagón. Y eso vos lo regalás.
Un abrazo, me acuerdo cuando te vi en la terminal hace unos años, y no te pude saludar. Y se me cae una lágrima y me imagino que vos me decís "no boludo, dejate de joder" y me contas un chiste para que deje de llorar. O me dibujas un Boogie, un Inodoro, un Mendieta. Y entonces está todo bien.
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