Trabajaciones de verano 2017

0 comentarios

Bueno bueno, pasó otro mes desde la última entrada. Definitivamente, es mi organismo el que me hacer acordar de esto en ciclos lunares. Lo que pasa es que a veces me siento antes, y a veces un poco después.

Estas tres semanas de vacaciones he trabajado como un loco. Como un animal de tiro, dirían algunos, tirando de muchos proyectos, algunos medio olvidados, otros no tanto. La verdad es que me siento muy orgulloso, porque pude hacer MUCHO, tanto en cuestiones personales, como de hobby, como creativas y profesionales.

Además de escribir mucho para Alquimia Comics y en trabajar para el desarrollo de nuevos proyectos (algo de eso está comentado en esta nota que nos hicieron para Rosario 12), pude organizar muchísimo material de todo tipo y cerrar varios guiones e ideas, además de ordenar completamente el material para los talleres de guión y generar material nuevo.

Por si fuera poco, pude volver al ruedo del rol con Aerith, como comento en estas dos entradas. Di muchos pasos importantes en la consolidación del reglamento y estoy agregando algunos detalles de ambientación como para cerrar algunos temas. Estoy más que contento con todo lo que pude hacer hasta ahora, y todavía tengo algunos días más hasta que tenga que retomar mi trabajo.

Por si fuera poco, estoy ordenando bibliotecas, leyendo muchas cosas recientemente compradas y otras que esperaban desde hacía AÑOS, y eso incluye principalmente comics. Muchos comics. Noches y noches en la cama leyendo comics. Cómo lo extrañaba.

Y se vienen más cosas para el finde, y los días que vienen.

Así que no me puedo quejar. Han sido una de las vacaciones más fructíferas de los últimos años. Sin duda, el principal adversario siempre es el "¡tengo que hacer más!" Como dije el otro día en FB, a veces había una carrera mental dentro de mi cerebro: tal vez media docena de ideas tratando de ser elegidas para ser la que llegara primero a la meta, y cuando ganaba, era eliminada y aparecía otra más. Eso me costó un poco de insomnio, y es algo que no tengo cuando trabajo. Pero estoy trabajando en eso, y creo que hice muchos progresos. En eso también es positivo: aprendí mucho sobre mí y sobre cómo trabajar en todo esto.

Así que, si bien no estoy pelado como el hombre de la foto, ni usé traje, sí estuve en patas gran parte de estos días, y sí, estaba en una playa mental, que variaba de estado según el mundo en el que estuviera viviendo. De nuevo, no me puedo quejar.